lunes, 8 de enero de 2007

Reseña: Artorius

Artorius.

César Vidal.


Grijalbo, Barcelona 2006. 379 páginas.

En esta novela asistimos a una revisión del mito artúrico desde un punto de vista meramente histórico. Ambientada en el siglo V d.C. en Britania, nos cuenta las peripecias de un físico, Merlín, desde su infancia hasta su madurez en la que conoce al joven Artorius, quien se convierte en el Regisimus de Britania y posteriormente en el Imperator.

Para el lego en la materia artúrica basta con haber visto la película Excalibur para ir reconociendo algunos de los momentos más importantes del libro. En esta ocasión Vidal nos propone una serie de acontecimientos reales que pudieron ser la base para las posteriores leyendas. Así la magia de Merlín sería el resultado de las exageraciones populares sobre sus verdaderos conocimientos médicos. Excalibur y su misterioso poder serían la consecuencia del peculiar sonido de la espada de Artorius. Etc.

La novela se sitúa en una época complicada y bastante desconocida por el público en general, los últimos años del Imperio Romano Occidental, y trata de trasmitir la sensación de desmembramiento, caos y desorden que siguió a la retirada de las legiones romanas de Britania y la posterior caída de Roma. Pese a que gran parte del relato se centra en lograr la sensación de desasosiego y pérdida, no llega a calar en el lector. Además los continuos paralelismos que el autor ha querido enlazar con el presente español debilitan aún más cualquier atisbo de credibilidad.

El libro es débil como relato. La redacción a veces peca de ser artificialmente poética, otras veces es muy detallista para posteriormente ser vaga, rápida y poco descriptiva. La lengua utilizada recuerda a la doctrina Asimov (usar los vocablos más usados por el ciudadano medio) aderezada con latinajos (traducidos, al menos), citas de Virgilio (una por capítulo, salvo en uno) y continuas advocaciones a San Pablo (apóstol de los gentiles). No hay nervio. No engancha.

Además el título es engañoso ya que en realidad tres cuartas partes del libro son la vida y obras de Merlín quedando relegado el personaje de Artorius al final de la novela, de manera secundaria y desarrollando sus gestas a través de comentarios y moralinas de Merlín.

El valor del libro en cambio puede encontrarse en su capacidad para bucear en los orígenes del mito artúrico, develando posibles (y creíbles) situaciones de las que nacerían posteriormente las leyendas. El autor añade al final los datos históricos sobre los personajes reales así como datos de carácter histórico que refuerzan las teorías que sitúan las aventuras de Merlín (y Arturo) a salto de caballo entre la decrepitud de la Antigüedad tardía y los albores de la Edad Media.

En cambio le resta impacto el olor a moralina cristiano evangélica del autor, así como los continuos guiños a los "problemas" que, según César Vidal, asolan España y Europa hoy en día (pérdida de valores cristianos, debilidad cultural occidental frente a los otros, falta de capacidad de reacción, etc.).

1 comentario:

Anónimo dijo...

Despedida sureña: God Bless Ya....!