Reseña: Bajo las aguas

Bajo las aguas.

Roberto Malo / Daniel Tejero / Miguel Calero.

Reseña de: Santiago Gª Soláns.

Apache libros. Col. Librojuegos # 1. Madrid, 2020. Ilustración de portada: Miguel Calero. 150 páginas.

Con este título Apache inicia la andadura de su colección de Librojuegos destinados, a tenor del tono de esta primera entrega, a un público tirando a joven que sepa disfrutar de las buenas aventuras. Es esta una primera entrega cargada de fantasía en la que prima la acción y la emoción, pero también la valentía, la lealtad y el amor. A diferencia de lo que suele ser habitual en este tipo de propuestas, Bajo las aguas ofrece la posibilidad de jugar no con uno sino con dos protagonistas, separados por dramáticas circunstancias, que se buscan la una al otro, y que tendrán que elegir diferentes opciones y superar las más diversas pruebas y obstáculos que va a surgir en sus caminos para poder reunirse. No lo tendrán fácil, y muchas de esas elecciones terminarán de forma harto concluyente, mientras tan solo unas pocas llevarán a la felicidad. Muchas decisiones que tomar.

Bajo las aguas del Océano Índico, en el atolón de Ari, conocido también como «Alif, Alif» y situado en las islas Maldivas, al sur de la India, existen dos reinos submarinos enfrentados por el control del territorio: el reino de los Harizs y el de los Gortol. Sus habitantes son unos seres de aspecto humano pero que apenas miden unos cinco centímetros cuando llegan a adultos. Tras largo tiempo de enfrentamientos los monarcas de ambos reinos han llegado a un acuerdo de no agresión que se verá reforzado con el enlace de Naya, la princesa Hariz, y el guerrero gortol Axala, quienes se aman de forma incondicional.

Desgraciadamente el traicionero rey Gortol tiene unas desmesuradas ambiciones, deseando gobernar bajo las aguas de todo el atolón. Una semana antes del enlace matrimonial los esbirros del rey secuestran a Axalat y lo encierran en una celda de coral blanco. Si Shauri, el rey Hariz, no cumple sus demandas Gortol ejecutará al joven y la boda nunca tendrá lugar. Mientras ambos reinos se preparan para una guerra que parece inevitable, Naya, tras enterarse del ultimátum, monta en su caballito de mar y parte al rescate de su amado, aunque este tampoco va a permanecer inactivo ante la adversidad. Empieza la peligrosa aventura.

El joven lector tiene ante sí dos opciones. Deberá elegir si sigue a la valiente Naya en una misión de rescate para la cual deberá sortear multitud de peligros y vencer a un buen número de enemigos, o al arrojado Axalat en sus intentos de fuga para lo que deberá lidiar con los guerreros gortol mientras decide si debe huir o mejor acabar con el malvado rey… Ambas opciones van a llevar a emocionantes posibilidades. Pero lo más recomendable es alternar aventuras entre una y otro, disfrutando así de una experiencia mayor y más satisfactoria.

El libro dispone de veintisiete finales distintos —o veintisiete tramas si se prefiere—, desde el más trágico al más feliz, pasando por algunos nostálgicos, algunos románticos, algunos agridulces y muchos fatídicos. Cada decisión que se toma abre un camino diferente, una diferencia que puede suponer el triunfo o el fracaso final, la vida o la muerte, en una aventura en que prima un mensaje de lealtad, cariño y perseverancia.

Y todo ello acompañado de las expresivas, representativas e impactantes ilustraciones de Miguel Calero, algunas de las cuales se pueden disfrutar acompañando a esta reseña, que sirven para poner en perspectiva algunas de las más comprometidas situaciones en que los protagonistas, y los lectores con ellos, se van a ver envueltos dependiendo del camino que tomen.

Barreras de medusas, celdas de coral, abismos insondables, frías corrientes marinas, ejércitos enemigos, praderas de algas, rayas asesinas, oscuras cavernas submarinas, depredadores insaciables, amenazas abisales, aliados inesperados, tiburones, pulpos, arañas de mar, hipocampos, peces ballesta, crustáceos varios… El fondo del mar encierra muchos más peligros y oportunidades de lo que cualquiera pudiera figurarse. Bueno, no, cualquiera no. Malo y Tejero imaginan un mundo submarino tan lleno de peligros como de aventuras. En la mano del lector queda conocer y vivirlas todas.