Jeff Lemire / Andrea Sorrentino.
Reseña de: FJ Arcos Serrano.
Astiberri. Col. Sillón Orejero. Bilbao, 2020. Título original: Gideon Falls, vol. 4: The pentoculus. Traducción: Santiago García Fernández. Cartoné. 128 páginas. Color.
Después del viaje a través del tiempo y el espacio del capítulo anterior, Norton y Clara se encuentran atrapados en el pueblo de Gideon Falls con un psicópata asesino. Mientras tanto, Angie y el padre Fred se ven cara a cara con el obispo en el Gideon Falls de la gran ciudad, donde los secretos de la máquina pentáculo se revelan en todo su delirante esplendor. En medio del caos, ¿qué pasará cuando los Labradores por fin respondan a la llamada del deber?
Una vez leído este nuevo volumen de Gideon Falls, volvemos a hacer hincapié en que el Premio Eisner otorgado el año pasado no fue por casualidad. Jeff Lemire vuelve a sorprender al personal cuando ya parecía todo inventado. El guionista retuerce el argumento de la serie una y otra vez, dosificando el misterio de manera impecable.
De momento, y de manera más o menos parcial, ya vamos conociendo algunas de las respuestas a esas preguntas que todos nos hacíamos. El guionista canadiense aún se guarda algunas revelaciones para el tramo final de la serie y me tiene enganchado como pocas veces me ha pasado últimamente con una serie abierta. Maldito Lemire.
Aquí tenemos terror, suspense, ciencia ficción… y para redondear todo ello unos personajes radiografiados al milímetro, donde se puede comprobar la maestría de Lemire en su control absoluto del medio.
Con respecto a Andrea Sorrentino vuelvo a decir “lo de siempre”. Es un autor único. Quien ya se haya acercado a este título sólo queda señalar que su dibujo y la atmósfera que imprime a este cómic es, sencillamente, perfecta. Es como si el dibujante italiano hubiera nacido para hacer esta serie. Definitivamente no puedo imaginarme a otro para esta cabecera.
Si ya en los anteriores tomos nos dejaba con la boca abierta, en este cuarto el nivel de creatividad y talento es, posiblemente, el mayor de toda su producción hasta la fecha. Detalle totalmente digno de todos los elogios posibles, ya que mantener ese nivel y superarse a su vez en cada nuevo arco argumental sólo está al alcance de muy pocos.
No podemos olvidar el hercúleo trabajo de Dave Stewart al color, ya que se complementa a la perfección con el dibujo, regalándonos para la ocasión viñetas de esas que se te quedan clavadas en la retina. Astiberri nos trae este nuevo arco argumental en un cuidado y excelente tomo en cartoné que sigue la misma línea de calidad que los anteriores.
En definitiva: este Gideon Falls 4. El pentáculo nos muestra a un equipo que, nuevamente, da lo mejor de sí para regalarnos lo que es, sin lugar a dudas, una de las mejores series abiertas que hay actualmente en el mercado…y va camino de convertirse en un auténtico clásico moderno del género de terror; no os quepa duda de que yo estaré aquí para comprobarlo…¿y vosotros?
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