Miyuki Miyabe.
Reseña de: Santiago
Gª Soláns.
Quaterni ediciones.
Madrid, 2013. Título original: ブレイブ・ストーリー.
Traducción: Eva González Rosales. 377 páginas.
Este segundo volumen
continúa justo donde habían quedado en la entrega anterior las
andanzas del «Viajero» Wataru a través de las tierras de
Visión en su búsqueda de completar el Sigilo, la
llave que le permitirá acceder a la Torre del Destino. Para
ello, el niño debe hacerse con las cuatro gemas que todavía le
faltan por encontrar, y alcanzar la torre para obtener así el deseo
que anida en su corazón. Al finalizar el anterior volumen, el niño
era consciente de que uno de los dos Viajeros, Mitsusu o él,
debía ser sacrificado al finalizar uno de ellos su misión,
imbuyendo así a la narración de gran premura y emoción, haciéndole
debatirse entre la búsqueda de su propio bien o el de los habitantes
de Visión. Esta segunda parte ahonda en la exploración del mundo
creado para la ocasión, visitando numerosas localizaciones nuevas y
superando diversas pruebas, mientras prende la mecha de la guerra y
la insurrección a su alrededor. A través de una historia, como ya
comentaba en la reseña de Un nuevo viajero, muy
emparentada en la idea con La historia interminable de
Ende —un joven que viaja a un mundo fantástico creado por
su propia imaginación y que depende de sus acciones para
sobrevivir—, el relato sobresale por la manera de enfocar ciertos
temas, más habituales en la literatura para adultos que en una
infantil-juvenil como la que nos ocupa, de una forma tan entretenida como didáctica.