La sonrisa del león.
Roberto Malo.
Ilustrado por Javi Hernández.
Reseña de: Santiago Gª Soláns.
Dissident Tales Editorial. Col. Maldoror. Zaragoza, 2015. 149 páginas.
En esta «pequeña» pero intensa, muy intensa antología, con la que Dissident Tales inicia su nueva colección Maldoror, se reúnen sesenta cuentos que navegan entre lo micro y lo breve —alguno incluso menos que «micro»—, escritos durante un dilatado periodo de tiempo y que una vez más desvelan el rico, y bastante surrealista, mundo interior de Roberto Malo. Cuentos, pues, reposados y meditados, rescatados del posible olvido para ofrecer a los lectores una palpitante experiencia. Cuentos sorprendentes, excitantes, ingenuos, explosivos, críticos, tiernos, divertidos, dolorosos, llamados a despertar sensaciones. Cuentos que juegan al despiste para ofrecer con una última frase un giro que cambie el significado de todo lo narrado; actos de prestidigitación que hacen que lo que parece divertido se cierre con un horrorizado escalofrío o que la situación más triste termine con una explosión de ternura y alegría. Cuentos que no son sino la perfecta y muy heterogénea muestra del muy variado universo literario del autor, donde da cuenta de su muy personal forma de narrar, de todas sus filias, de su sorprendente manera de mirar y comprender el mundo y de un sentido del humor intransferible. No existe una línea temática o de género que los conecte a todos, salvo el muy particular y reconocible estilo de escritura —probad a leerlos en voz alta— de Malo, que ya constituye un género en sí mismo.