La tempestad del Segador.
Malaz: el libro de los caídos 7.
Steven Erikson.
Reseña de: Santiago Gª Soláns.
Nova. Barcelona, 2019. Titulo original: Reaper's Gael. Traducción: Marta García Martínez. Revisión de la traducción: Alexander Páez. Ilustración de cubierta: Alejandro Colucci. 1168 páginas.
El séptimo tomo del libro de los caídos de Malaz, último de los que llegara a publicar la fenecida editorial La Factoría y recuperado para alegría de los lectores por Nova, pone en ruta de confluencia las tramas que Erikson había dejado planteadas tanto en Mareas de medianoche como en Los Cazahuesos, mostrando lo que está acaeciendo en el Imperio letherii, gobernado por el inmortal emperador Rhulad Sengar, mientras que los diversos implicados malazanos en el drama van cubriendo etapas hacia un destino que solo puede resultar en conflicto. El autor vuelve a volcar en el texto todos sus intereses antropológicos, políticos y económicos, marcando este último aspecto de forma decidida el devenir de los inminente eventos. Un buen número de líneas narrativas alcanzan aquí su culminación, pero muchas otras se abren para seguir dejando al lector con la miel en los labios y lleno de expectación. Y si bien las muertes estaban a la orden del día hasta el momento, en este volumen la historia se imbuye de una nueva cota de emoción y quebranto con un par de fallecimientos que dejan con un puño estrujando el corazón. Intriga, drama, tiranía, magia, violencia, economía aplicada, política, guerra, traición, humor, heroísmo, sacrificio y muertes por doquier. Un día más en Malaz.
—Y, una vez más, es recomendable haber leído los tomos anteriores de la serie antes de embarcarse en la lectura de esta reseña—.